Deportes

Soberano Jr: De “pasar hambre y caminar desde la Arena Coliseo hasta la México” a alternar con sus ídolos.

Luis Garduño

Francisco Castellanos J.

FOTOS: Luis Garduño.

La Comarca Lagunera es hogar de algunas de las dinastías más exitosas de la historia de los cuadriláteros y se convirtió en lugar donde el Soberano Jr. dio sus primeros pasos. 

Soberano, su abuelo; Euforia, su padre. Ambos le dejaron algo de mucho valor: “la herencia que me dejaron fue portar este nombre, lo cual es algo que me llena completamente de orgullo”, señala en entrevista exclusiva para ESTO. 

Como lo dictaba su estirpe, en la sangre del Soberano Jr. corrió la lucha libre desde su nacimiento. Ansioso de convertirse en un luchador como sus antecesores, siempre quiso ser una estrella del ring.

“Recuerdo que mi padre me trajo cuando yo tenía 15 años, me dejó en las manos de Daniel López ‘El Satánico’ ahí en la Arena Coliseo”, rememora al mirar el escudo del Consejo Mundial de Lucha Libre. 

Se podría pensar que al ser hijo de una dinastía de renombre en la lucha libre el camino y las oportunidades estarían en bandeja de plata, para Soberano Jr. no fue así. 

”Lo más difícil de mi carrera ha sido pasar hambre, traer los zapatos rotos, no traer para el transporte público, caminar desde la Arena Coliseo hasta la México, son cosas que nunca se olvidan”, enlista a manera de hacer notar sus orígenes.

Estar presente hoy en los grandes carteles de la empresa más longeva de Lucha Libre en México y luchar con gente que siempre consideró imposible es algo que le mueve despierta lo más nobles sentimientos.

“Alternar con mis ídolos es algo muy bonito, cuando miró atrás veo que todo el sacrificio ha valido mucho la pena, para hoy formar parte de estas siglas CMLL.”

“Jamás me imaginé estar caminando por las calles de Japón, Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Canadá, siempre soñé ser parte de este elenco, pero nunca imaginé que mi nombre y mi lucha llegaran tan lejos.” 

Respeto y dedicación son dos cosas que Soberano Jr. siempre ha tenido en su carrera, el deporte le ha devuelto esos sacrificios, los ojos se le inundan al agradecer tanto al pancracio

“No tengo con qué pagarle a la Lucha Libre todo lo que ha hecho por mí, la ropa que visto, los alimentos que están en mi mesa, la familia que tengo, los viajes que me ha dado, de pequeño soñaba con hacerlo gratis y ahora vivo de la lucha libre, vivo de mi cuerpo y vivo de lo que más amo que es este deporte”, señala.

Click to comment
To Top