La salud mental de los adolescentes.

No es raro que los adolescentes experimenten niveles elevados de estrés, ansiedad y depresión durante el año escolar mientras enfrentan factores estresantes conocidos como el acoso, la presión de los compañeros y las exigencias académicas y extracurriculares. Sin embargo, una investigación reciente, “Asuntos familiares: Informe sobre el estado de la salud mental familiar en los EE. UU.”, realizada por MDLIVE, un proveedor líder de atención virtual, encuentra que hay muchos más problemas más allá de las paredes del aula que están afectando la salud mental de los adolescentes.
¿Qué estresa a los adolescentes de hoy?
La buena noticia es que los adolescentes desearían que hubiera más debate familiar sobre muchos de estos temas, incluidos los derechos LGBTQ+, la seguridad escolar y la justicia social en los EE. UU. Si bien no siempre es una situación cómoda o natural para los padres, es importante que encuentren oportunidades para hablar con sus hijos sobre los problemas que les preocupan.
“Los padres pueden sentirse incómodos al hablar sobre ciertos temas actuales porque es posible que ellos mismos no los entiendan completamente, temen no estar de acuerdo con el punto de vista de sus hijos adolescentes o subestimar el impacto de estos temas en sus hijos”, afirmó la Dra. Shakira Espada-Campos, asociada jefe de salud conductual en MDLIVE. “No siempre es fácil, pero abordar estos temas difíciles muestra a los adolescentes que la comunicación abierta y honesta es importante y puede tener un impacto positivo en su bienestar”.
Compromiso y apoyo
Si bien hablar sobre salud mental con sus hijos puede parecer abrumador, Espada-Campos describe cinco formas sencillas y accesibles en las que los padres pueden abordar temas difíciles y señalar cualquier otra preocupación que ellos o sus hijos puedan tener:
- Haga su tarea
Hablar con los adolescentes sobre temas sociales importantes requiere sensibilidad, empatía y voluntad de aprender. Antes de iniciar una conversación, familiarícese con el tema, pero siéntase cómodo sin ser un experto. Los adolescentes quieren apertura, no necesariamente experiencia, y quieren saber que usted los escuchará.
- Mantenga sus posiciones bajo control
Todos tienen una opinión, pero en el caso de los adolescentes, es fundamental mantener sus propios puntos de vista bajo control a medida que se desarrolla la conversación. Es posible que ya conozcan su opinión con sólo observarlo. No es necesario que oculte sus puntos de vista, pero asegúrese de no restar importancia ni descartar su posición o inquietudes.
- Sintonice las redes sociales
Considere las redes sociales como una ventana al mundo de su hijo adolescente. Respetando su privacidad, pregúntales sobre sus creadores de contenido favoritos o canales de noticias que siguen y comienza a sintonizar esos canales usted mismo. Esto puede brindarle una mejor comprensión de los temas o ideas que resuenan con ellos y, a su vez, ayudarlo a determinar los temas que vale la pena discutir.
- Considere el enfoque
En lugar de programar un tiempo específico para hablar, lo que puede ejercer una presión excesiva sobre ellos, considere iniciar la conversación durante una actividad compartida, como cocinar o caminar, para permitir un diálogo más natural y relajado. Intente hacer preguntas específicas como “¿Cuál fue la mejor o más difícil parte de tu día?” o “¿Con cuál de tus amigos crees que tienes más en común?” que generan respuestas que revelan su mentalidad actual. Y sea coherente con estas conversaciones, lo que le permitirá a su hijo adolescente saber que cuenta con su apoyo constante.
- Reconocer las señales
A diferencia de una dolencia física, es posible que los problemas de salud mental no siempre presenten signos obvios. A menudo son los cambios sutiles los que pueden indicar un problema, incluidos cambios en el comportamiento, el lenguaje corporal, el rendimiento académico, el sueño o los hábitos alimentarios. Si su hijo parece estar alejándose de actividades que antes disfrutaba o de amigos y familiares, también puede ser una señal de que está teniendo dificultades y que es hora de hablar con él sobre apoyo profesional.
Conozca sus opciones de soporte
Recuerde, el objetivo final es garantizar que su hijo se sienta escuchado, comprendido y apoyado. Hay muchas opciones disponibles para obtener la manutención de sus hijos de un profesional de salud mental.
Los servicios de terapia virtual son una opción conveniente y flexible para los adolescentes: la comodidad de estar en su propio entorno puede facilitar el diálogo abierto y, al mismo tiempo, adaptarse a los horarios, a menudo agitados, de los adolescentes y los padres. Siempre comuníquese con su plan de beneficios de salud para verificar qué servicios conductuales pueden estar cubiertos.
